6 octubre, 2017
La sabiduría convencional nos indica que el gerente debe ser líder. Debe aprovechar las oportunidades y utilizar su inteligencia e impaciencia para ejercer su voluntad sobre un mundo caprichoso. En épocas turbulentas, el gerente es más importante que nunca.
Esto se debe a que desempeñan un papel vital y claro que ni los líderes carismáticos ni los grupos de autogestión pueden representar. El papel del gerente es penetrar en cada empleado para liberar sus talentos singulares y transformarlos en desempeño. Este papel representado con cada individuo a la vez, constituye la fuente de poder de la compañía.
Su papel también es catalizador. Concretamente, el gerente genera desempeño en cada empleado acelerando la reacción entre los talentos de éste último y las metas de la compañía, y entre los talentos del empleado y las necesidades del cliente. Cuando centenares de gerentes representan bien este papel, la compañía se fortalece, empleado por empleado.
El gerente debe poder cumplir extremadamente bien con estas cuatro actividades:
Estas cuatro responsabilidades son las más importantes con las que debe cumplir un gerente. Aunque posea mucho carisma y toda la inteligencia, si no puede realizar bien estas cuatro actividades entonces jamás podrá sobresalir.
1. Usted debe saber elegir a la gente. Se necesita una mente muy despejada para poder hacerlo bien. Más importante todavía es que usted sepa hasta qué punto puede cambiar a una persona. Debe conocer la diferencia entre talento, habilidades y conocimiento. Debe saber cuáles puede enseñar y cuales debe limitarse a contratar. También debe aprender a formular la clase de preguntas que le permitirán ver más allá del deseo del aspirante de impresionar para llegar a sus verdaderos talentos.
2. Debe poder establecer con precisión las expectativas laborales. Esto no se limita únicamente a establecer objetivos. Debe poder mantener la atención de la persona en el desempeño presente. Asimismo, debe saber en cuáles aspectos del trabajo deberá exigir cumplimiento riguroso y en cuales estimulará a su empleado a utilizar su propio estilo. También debe equilibrar la necesidad igualmente apremiante de la originalidad y la creatividad.
3. Motive a cada uno de sus empleados. Como gerente tiene solo una cosa para invertir: tiempo. El cómo y con quién invierte ese tiempo determinará su éxito como gerente. Entonces, ¿debe pasar más tiempo con sus mejores empleados o con los que tienen dificultades?, ¿debe ayudar a una persona a corregir sus debilidades, o debe concentrarse en las fortalezas? Para ayudar verdaderamente bien a sus empleados a sobresalir, usted debe poder responder a estas preguntas.
4. Desarrolle su carrera profesional. Cuando un empleado le dirige la pregunta inevitable ¿y ahora hacia dónde voy?, ¿puede usted ayudarme a progresar? , usted debe saber qué decir. ¿Deberá ayudar a que todos sean ascendidos?, ¿es correcto decirle que asista a unos cursos de capacitación y trabaje para progresar? Es probable que usted se sienta demasiado cercano a su gente. ¿Podría esa corta distancia llegar a ser demasiado estrecha?, ¿qué sucederá si tiene que liquidar a alguien a quien ha aprendido a apreciar?, ¿qué le debe a su gente en todo caso? Sus respuestas a todas estas preguntas le servirán de guía mientras hace lo necesario por facilitar el éxito de sus colaboradores, tanto en sus cargos actuales como hacia el futuro.
Por Redacción Comercial | Prensa Libre
Fuente: Primero, rompa todas las reglas. Que diferencia a los mejores gerentes del mundo de los demás. Marcus Buckingham, Curt Coffman. Editorial Norma S.A.
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