3 abril, 2017
¿Por qué fomentar la creatividad en el trabajo? Albert Einstein afirmaba que “la creatividad es la inteligencia divirtiéndose”.
La creatividad es la capacidad humana para generar ideas o conexiones imaginativas en un campo específico, por medio de la creación de soluciones innovadoras que logren un cambio de paradigma.
Muchas empresas están apostándole a programas que motiven a sus colaboradores y los hagan sentir cómodos y felices, porque un empleado motivado es más productivo. Un trabajador con estímulos se compromete con el funcionamiento de la compañía y busca maneras de resolver problemas y encontrar soluciones.
Con base en la experiencia: Aunque el ritmo acelerado de las organizaciones no deje tiempo libre para invertir en creatividad, existen empresas que han logrado brindarles el momento, el respaldo y los medios para lograrlo. Las fábricas de automóviles Renault, en España, son un ejemplo de ello. Implementaron un sistema de innovación participativa llamado Ideas Concretas de Progreso (ICP).
En él los operarios pueden aportar sugerencias para mejorar resultados y solucionar problemas cotidianos en el trabajo. Los efectos han sido tan positivos que la aplicación de estas sugerencias ha alcanzado el 96%, adquiriendo beneficios paralelos. Entre ellos, se destaca el ahorro de 900,000 euros en 2009, en la fábrica de cajas de cambios de Renault, ubicada en Sevilla, España.
Ahora, es común escuchar sobre empresas con alto ritmo de trabajo, donde los colaboradores sacrifican su hora de almuerzo o realizan horas extras para estar al día con sus labores. En estos lugares, es importante que las personas cuenten con oportunidades para relajarse, para reírse de algún chiste con sus compañeros o simplemente, para alejarse de la oficina un momento.
A tomar en cuenta: Todos los empleados agradecen que se invierta en su habilidad creativa y sucede lo mismo con los equipos de trabajo. Lo último requiere un poco más de planeación y logística, pero todo esfuerzo vale la pena. A veces es suficiente con sacar al equipo de su entorno laboral o pedirles que vean una situación desde otro punto de vista. Incluso, se ha demostrado que es constructivo dejar que los equipos resuelvan un problema sin la ayuda del jefe, pues basta con la motivación dada con anterioridad para delegar acciones que tengan buenos resultados.
Por Redacción Comercial | Prensa Libre
Fuente: Adaptado del libro 1001 formas de motivar a los empleados, de Bob Nelson. Grupo Editorial Norma.
Creatividad en el trabajo, Fundación Factor Humano, 2011
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